Anoche disfrutamos de una nueva noche sabinera, esta vez en el auditorio de La Eliana. Pero primero quiero quejarme de que en Internet anunciaban las entradas a 12€ cuando allí en las taquillas nos la cobraron a 15€, no entiendo ese cambio de precio. Y después el evento estaba anunciado para las 21.30h y resulta que empezó a las doce de la noche porque el pueblo estaba de fiestas, empezó tarde y además hubo una banda telonera (tengo que decir que no me gustan los teloneros porque yo lo que quiero es ver a la banda de Sabina y no a gente que ni me va ni me viene). Bueno, decir que esta noche sabinera ha tenido un carácter muy formal: es lo que tiene cantar en un auditorio donde todo el mundo está sentadito (por cierto, lleno hasta arriba) y con el ayuntamiento del pueblo por medio. Quieras o no, ya no es tan espontáneo, se controlan más y no hay tanto cachondeo. No tiene nada que ver con los shows en sitios como la sala El loco o La Matisse donde aparte de ser todo mucho más natural, los tienes a medio metro (aunque aquí estábamos como siempre en nuestra fila uno) y la gente se vuelca y se desmelena mucho más. En cuanto al repertorio aquí fue más corto pues se dejaron algunos temas como Antonio que no tocó "A la orilla de la chimenea" ni Pancho cantó "Y no me importa nada"; pero tocaron el tema "La canción de cuna de la noche y los tejados" que fue la novedad de la noche. En la segunda parte de la noche, lo que vimos es que la gente que subía a cantar era bastante profesional, quitando dos o tres entre los que me incluyo. Mi amigo Beni y yo subimos a cantar el tema "Princesa", me lo pasé muy bien pero no estuve tan suelta como en otras ocasiones porque el ambiente tan serio no me moló mucho. Luego subí con unas chicas a cantar "Noches de boda" y "Y nos dieron las diez" por invitación de Pancho. A las tres de la mañana nos despedíamos de ellos, donde pude hablar un momento con Pancho y sus bonitas botas (regalo de reyes) y les acercamos al hotel. Ahora hay que esperar al 7 de junio para volver a verlos de nuevo en La Matisse (
San Matisse como dijo Pancho), seguro que ahí lo pasamos muchísimo mejor! Lo malo es que aún queda mucho...
